Como paseando, Jean Pierre saluda en uno de los tramos de la competencia que unió Bariloche con Pilcaniyeu.
Se corrió la Doble Pilcaniyeu histórica donde una de las figuras principales fue uno de los vecinos más reconocidos de Villa la Angostura: Jean Pierre Raemdonck.
Con tan sólo 71 años Jean Pierre aceleró de igual manera que en 1967, año en que se corriera la última competencia oficial, donde también Jean Pierre no escatimó esfuerzo y velocidad, acorde a su pasión por el deporte de dos ruedas.
En el 2007, al cumplirse 40 años de la que fuera la última edición oficial de la Doble Pilcaniyeu organizada por el Auto Moto Club Bariloche, se recordó por primera vez aquella competencia que fuera ganada en forma absoluta por Juan Carlos Soriani a bordo de una Zanella 125, similar a la que usó hace dos años.
La competencia se realizó bajo la modalidad de regularidad, utilizando un sistema de autocontrol, llevando el piloto un reloj para poder calcular los tiempos entre pancarta y pancarta, y un puesto final donde habrá un controlador.
Se podía elegir tres promedios de acuerdo a la moto, para lo que se entregó una planilla que se pegó al tanque de la motocicleta con los horarios ideales entre control y control.
Sin embargo el mismo Jean Pierre cuando conversó con LA ANGOSTURA DIGITAL explicó que no fue todo tan fácil. "El cronómetro iba sujeto a la moto, pero entre tantos serruchos y pozos que tenía el circuito a lo largo del camino, hizo que a los pocos kilómetros ya anduviera mal, o directamente dejara de funcionar. Pero lo importante no era el resultado, sino volver a vivir aquellas carreras de la década del sesenta".
Aquellos primeros años
Jean Pierre Raemdonck nació el 19 de marzo de 1938 en Bruselas, Bélgica; es uno de los cuatro hijos del matrimonio formado por Jean Raemdonck y Cécilde Braun.
Cuando llegó a la capital argentina, conoció a un compatriota, Jean Groverman, quien lo invitó a venirse a la Patagonia argentina (Villa La Angostura) donde este belga con su familia se radicaría pocos meses después.
Al regresar al país europeo, decidió aceptar el desafío en el sur argentino (“a prueba por un año a lo sumo...” le suplicó a su padre) y sólo dos meses después, nuevamente se embarcó con destino a estas tierras de Sudamérica.
Instalado en Villa La Angostura, comenzó su historia en la Patagonia. Entrevistado por quien esto escribe, Jean Pierre recuerda “cuando llegué era un pueblo muy chiquito, creo que no tendría ni quinientos habitantes, no había asfalto, ni gas, y apenas unos pocos autos (no más de diez), la vida era muy simple y nos conocíamos todos. Compré la propiedad (hoy conocida como “Los Tres Mosqueteros”) por U$S 2.000 y ese mismo verano abrimos como restaurante para los pocos turistas que nos visitaban”.
Manteniendo aún su tonada extranjera, continúa “en el invierno con mis amigos pusimos en el Catedral de Bariloche un pequeño negocio con venta de “waffles” (especialidad belga) que tuvo una buena aceptación y continuamos haciendo las temporadas invierno-verano, y estábamos conformes con el resultado. Hasta que llegó la época de Sol Jet y Austral, y ante exigencias que no podíamos cumplir, decidimos volver y ver si podíamos hacer algo parecido en Villa La Angostura”.
Fue el gestor del centro de esquí del Cerro Bayo, además del impulsor del motocross desde Villa la Angostura para toda la Argentina. Es la imagen de una persona pujante y sacrificada, que supo ver mucho más allá del horizonte...
